sábado, 11 de enero de 2014

Los 21 escalones de la casa de calle Garibaldi (Trentinos en Villa Mitre)

Duilio, hijo de Albina Baroldi y Cornelio Ferrari. Mendoza, septiembre de 2012.


Duilio recuerda a su madre Albina Baroldi, y su casa en Villa Mitre en su infancia (primeros años de la década del '40):

Esa casa frente a la plaza, en Garibaldi, Villa Mitre, el segundo piso tenía 21 escalones, me acuerdo siempre, tremendos escalones de veintitantos centímetros, eran, no eran escalones comunes, había que subir empinado y bueno nosotros, cuando hacíamos lío, nos peleábamos, qué se yo, disparábamos para arriba y ahí escuchábamos que venía atrás, la mami para darnos la paliza, y saltaba los escalones, ta, ta, ta, se sentía por las chancletas que llevaba, ta, ta, ta, y nos escondíamos en el baño, o debajo de la cama o en cualquier lugar para escaparnos.
Yo me acuerdo que a nosotros nos tenía cortitos, no? Porque aparte tenía un buen físico, así, era grandota, y tenía una manaza más grande que la mía...


Lo que recuerdo siempre, los domingos, o feriados así, ella hacía la pasta, estiraba así, eran unos tremendos pedazos así de pasta estirados con el palo de amasar y después lo cortaba, los enrollaba y después los cortaba con el cuchillo a mano, y hacía los tallarines para todos, comíamos. Te imaginás, tres varones, papá y estaba Andrés también, éramos cinco varones que comíamos como descosidos, te imaginás que hacía una cantidad de pasta…

Duilio ricorda sua madre, Albina Baroldi, e la casa della sua infanzia a Villa Mitre (un quartiere della cittá di Bahía Blanca)


Quella casa di fronte alla piazza di Villa Mitre, su via Garibaldi, il secondo piano aveva 21 gradini, me li ricordo sempre, gradini altissimi di piú di venti centimetri, non erano gradini normali; e noi, fratelli, quando combinavamo qualche casino o litigavamo, salivamo di corsa su per le scale, e sentivamo che ci veniva dietro la mamma per darci... e lei saltava i gradini, sentivamo ta ta ta il suono delle sue scarpe e ci nascondevamo nella stanza da bagno, o sotto il letto, in qualsiasi posto, per scappare...  Io mi ricordo che era molto severa con noi, perché era alta e robusta, e aveva una mano piu grande della mia...

Quello che ricordo sempre, le domeniche o i giorni festivi lei faceva la pasta, stirava cosí, erano dei grandi pezzi di pasta, stirati cosí con il mattarello, e poi li tagliava, arrottolava la pasta e la tagliava sottile sottile con il coltello, e faceva gli spaghetti per tutti, mangiavamo... ti puoi figurare eravamo tre maschi, il papa e poi c'era anche l'Andrea, eravamo cinque uomini che mangiavamo cosí che faceva una grande quantitá di pasta


1 comentario:

Cristina F.S. dijo...

papa como te extrañamos! que persona tan buena, generosa,comprensiva... kos llenaste de ejenplos de honestidad y amor al trabajo. todos ños dias te lloro...